Sara Yuliana Orrego Muñoz nació un 1 de marzo de 1997, en Medellín, Colombia, el país que la ha visto crecer y formarse como uno de los rostros más solicitados por agencias de modelaje e incluso para protagonizar videos musicales, una carrera que está creciendo como la espuma.

Esta jovencita de 22 años, también se ha caracterizado por ser muy activa en las redes sociales, donde acostumbra a compartir aspectos de su vida personal, sus viajes a los lugares más paradisíacos del mundo, breves tutoriales de maquillaje y sus sesiones fotográficas. 

Esta chica quien tiene un hermano menor, solía utilizar ropa holgada y montar patineta cuando salía del colegio, un estilo de vestir muy similar al de los skaters, así como no paraba de escuchar todas las canciones de Belinda y Miley Cyrus, que hasta el sol de hoy siguen siendo sus artistas favoritas.

Pocos saben que una vez que Sara Orrego, salió de la secundaria rápidamente ingresó a la universidad, en ese momento comenzó cursando la carrera de Contabilidad, ya que estaba indecisa sobre que profesión quería. 

Posteriormente, se inclinó por Ingeniería Financiera, un poco emocionada por estar estudiando todo sobre números y negocios, comenzó a trabajar en una empresa donde se encargaba de llevar los inventarios y en la contabilidad.

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Por su mente nunca pasó la idea de convertirse en una afamada modelo, su único objetivo era estudiar como cualquier chica de su edad, pero su madre tenía ese sueño de ver algún día a su hija desfilar por alguna pasarela o posar durante una sesión fotográfica.

Con el concurso de Señorita Antioquia a la vuelta de la esquina y sin defraudar a su mamá, Sara, decide inscribirse en el concurso sin estar del todo convencida y tener esa breve experiencia.

Una vez que entró al concurso, la realidad fue otra ya que había chicas con más experiencia en el modelaje, sabían que iban a contestar ante las picosas preguntas del jurado, pero la realidad fue otra, ella no tenía ni idea de lo que estaba haciendo. Aunque no ganó se ubicó entre las 10 finalistas, pero al mismo tiempo sembró intriga entre los presentes.

Muchos tenían la leve curiosidad de saber quién era esta jovencita tímida, y es ahí cuando las puertas en el mundo del modelaje comienzan abrirse para ella, algo que incluso la impulsó a dejar de un lado sus estudios universitarios y ganarse el descontento de su padre.

Por si fuera poco, la influencer tuvo el privilegio de haber estado en la categoría instagirl, de la revista Playboy edición México, no hay dudas que es una de las grandes favoritas por las editoriales internacionales.

Ya era un hecho, esta beauty blogger colombiana se comenzó a transformar en el rostro favorito de muchas agencias y firmas de moda, incluso su primera sesión fotográfica llegó a través de un directo en su perfil de Instagram @saraorrego, el cual para ese entonces no tenía la misma cantidad de followers que tiene ahora.

Resulta que una importante diseñadora, la invitó a ir a un casting con el propósito de convertirla en la imagen teen de su firma, lo que no se imaginaba es que pasaría esta prueba de fuego y a los pocos días estaría posando junto a sus modelos favoritas, las mismas que solía ver en sus cuadernos y revistas.

Para su segunda sesión de fotos, Sara Orrego, debatía consigo misma si asistir al parcial de cálculos o no, hasta que se decide por la segunda opción, algo que emocionó mucho a su madre, pero su padre no estaba convencido en que dejara la universidad para dedicarse al modelaje.

Con el tiempo se convenció que su hija nació para esta industria, así que en estos momentos es su mayor apoyo en todo lo que está haciendo, su éxito se lo debe a su familia.
 
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 De las pasarelas a los videoclips

La instagramer se ha convertido en la favorita de muchos cantantes, ya que la quieren dentro de sus videos musicales, el primero en incluirla fue Kevin Roldan, quien luego de verla en el casting al que llegó gracias a uno de sus primos, ambos trabajan con el intérprete.

Tiempo después, fue convocada por una de sus redes sociales para estar en un videoclip de nada más y nada menos que Maluma, aunque al principio no creía mucho en la oferta ya que la contactaron por su cuenta de Instagram, fue su manager quien le dio todos los detalles de que la querían a ella para ese proyecto. 

Puede que al comienzo de su carrera como modelo, su perfil de Instagram (el que más utiliza) no tenía el mismo poder que tiene en estos momentos, pero después de participar en Señorita Antioquia, su cuenta pasó de ser discreta y privada, a una más profesional y pública.

Todos comenzaron a buscarla a través de este medio, incluso aún sus ofertas de trabajo siguen apareciendo en su bandeja de directo, algo que sin duda alguna es todo un acontecimiento y todo un sueño para ella.

Antes tenía un total de 2 mil seguidores, en la actualidad posee la cifra de 1,2 millones de followers, números que a medida de que pase el tiempo ira aumentando, ya que no solo suele compartir su vida profesional, sino que le encanta compartir sus viajes por todas partes del mundo, así como su faceta más íntima, si aún no la sigues no esperes más y disfruta del contenido que tiene para mostrarte.