La tiktoker española Lucía Correa vivió un infierno luego que otro tiktoker publicara unas fotos suyas. Ella platicó en su cuenta de TikTok todo lo que pasó y cómo se filtraron las fotos.
Lucía es una chica de 17 años de edad, nació en Barcelona y cuenta con más 281 mil seguidores en TikTok, plataforma donde es famosa por sus bailes, historias y mucho más.
Todo comenzó con amenazas
"Todo empezó a finales de mayo cuando empiezo a hablar con un chico que muchos conocéis", ha relatado sin querer dar nombres. Sin embargo, los datos han sido suficientes para que muchos señalen a Marcel Paris, otro creador de contenido con más de 700.000 seguidores que, aunque no ha negado las acusaciones, ha desactivado los comentarios de sus vídeos, reseñó el portal 20 minutos.
"A principios de junio le mandé unas fotos. Se las pasé por WhatsApp, fallo mío, e hizo captura", reveló la chava, quien destacó que este chico le dijo que tenía sus fotos y la amenazó con publicarlas. "Él me contó que alguien le había cogido el móvil y había enviado las fotos", explicó, al tiempo que aseguró que desconfía bastante de esa versión, a pesar de que "como él también trabaja en redes, sabe el daño que puede causar", resaltó la influencer.
"Empecé a recibir un montón de mensajes de amenazas de publicar con mis fotos (…) Llevé números de teléfono del grupo donde se filtró la foto, que luego extendieron la foto y capturas de todo el mundo que me escribía amenazándome (Correa, 2022)".
Sin consecuencias
En sus videos, donde cuenta lo sucedido, Lucía señala que la persona denunciada no ha sufrido consecuencias, la justicia ha archivado el caso, cosa que lamenta profundamente. "La persona denunciada ha quedado libre de cualquier consecuencia (…) Siento que ya no puedo hacer nada legalmente" y destacó que ha decidido usar su plataforma para pedir que dejen de enviarse las fotos.
Según ha explicado, tiene bloqueada distintas palabras en TikTok para que no le hablen del tema. Aun así, ha vuelto a recibir informaciones de que están volviendo a enviarse las fotos, llegando incluso a su colegio, su barrio o su hermano, destacó el portal 20 Minutos.
Este tipo de situaciones pasa a diario y no solo a influencer. Chavas, deben cuidar a quién le dan fotos o con quién se toman fotos, porque pueden ser usadas con fines realmente perversos. Este caso es uno de los tantos que no se denuncian por miedo. Lucía ha tenido el valor de contarlo y desde su plataforma.