Imelda Garza-Tuñón confesó temer por su salud mental tras la partida de su esposo y padre de su hijo, Julián Figueroa, quien murió a los 27 años el 9 de abril a causa de un infarto agudo al miocardio y fibrilación ventricular, así lo reseñó este viernes el portal Univisión.

En una entrevista al diario Milenio, Imelda conversó sobre la preocupación por el estado de su salud mental, pues desde hace tiempo fue diagnosticada con trastornos de los que no dio detalles, y dijo que continúa tratándose para que no se compliquen tras su pérdida.

“Mi psiquiatra ha estado al pendiente de mí para que los trastornos que padezco no se vayan a descontrolar”, expresó la chica, quien fue la que primero vio a su esposo sin vida en una habitación.

Mamá de Julián Figueroa es su fuerza

Por otra parte, Imelda comentó que su suegra, la actriz Maribel Guardia, ha sido un gran refugio para ella. “La experiencia ha sido dura” y afirmó que ha experimentado dolores de garganta y pecho, además de que se ha sentido “muy sola y triste”, declaró.

Y es que no es para menos, la muerte de Julián fue sorpresiva, no estaba enfermo, era muy joven y con un gran futuro por delante. Los mexicanos están consternados con esta pérdida.

Encuentro en sus sueños

Imelda reveló que ha soñado mucho con su esposo, con quien tiene un hermoso hijo. Dijo que en el sueño caminaba con Julián Figueroa “en una playa y que se mete al mar en el ocaso, hasta que ya no lo puedo ver”, recordó.

Imelda, quien llamó al servicio de emergencias tras encontrar a Julián Figueroa sin signos vitales en su casa, recordó al hijo de Maribel Guardia como un hombre divertido, generoso y amoroso con su familia.

“Lo recuerdo como una persona buena que ayudaba a quienes podía, constantemente hacía campañas para intercambiar saludos o canciones por donaciones para ayudar a personas con enfermedades o necesidad, como una persona divertida que siempre me hacía reír y compartíamos muchos gustos”, dijo.

Mafre de Julián agradece apoyo

Mientras tanto, la madre de Julián, Maribel Guardia, sigue sumida en una profunda tristeza por su hijo. “Es muy doloroso ver cómo entoerran a un hijo”, comentó en días pasados.

“Quiero agradecer a la prensa por los más de 25 arreglos que enviaron con recursos personales (no de sus medios), y a todos los amigos y compañeros por todo el amor enviado. Que Dios los bendiga. Gracias por tanto amor”, publicó en su cuenta Instagram.